Un presidente ejecutivo se prepara para dar un discurso importante delante de una audiencia grande. Para que se dé la cooperación entre el cliente y el coach, se asume que el discurso está bien preparado en términos del contenido. Durante su discurso, el cliente quiere transmitir una imagen convincente y de elocuencia, y también quiere prepararse para reaccionar con buenos argumentos a preguntas críticas.

El coach y el cliente revisan posibles escenas y reacciones de la audiencia ante el discurso, incluyendo recuerdos de situaciones similares en el pasado que no salieron bien. El coach aplica una prueba de reacción muscular para determinar posibles reacciones de estrés en todas esas escenas. Cada vez que el cliente se siente incómodo al recordar cierta escena, la prueba de reacción muscular sale débil. Seguidamente el cliente evalúa sus recuerdos de los acontecimientos estresantes del pasado con una escala bipolar que va de -10  a +10.  El valor 0 significa  “me siento totalmente neutro”. El valor -10 significa “esto es lo más desagradable posible”. El valor +10 significa “esto es lo mejor y lo más agradable posible”.

Valoración de los recuerdos en una escala bipolar.

Determinar la intensidad del malestar subjetivo

Con un “escaneo corporal”, el cliente identifica exactamente dónde se localizan en su cuerpo las emociones negativas que están relacionadas con el evento pasado: un golpe en el estómago, la garganta apretada, una opresión en el pecho, el cuello rígido, etc. A continuación comienza la intervención. Se le llama set a una secuencia de 24 aleteos de izquierda a derecha.

Durante el aleteo el cliente se focaliza en la imagen del evento desagradable y en la emoción relacionada con la sensación en su cuerpo. Tan sólo 6 u 8 aleteos más tarde el cliente se siente liberado de los pensamientos desagradables y de las emociones conectadas con éstos. Los músculos de sus hombros se relajan, siente la garganta abierta, siente su estómago agradablemente tibio y relajado, y la prueba de reacción muscular sale fuerte. Esta sensación de relajación persiste incluso cuando piensa en la escena previamente estresante. En este momento, el cliente hace un escaneo corporal y se concentra en la sensación más agradable y fuerte que aparece en su cuerpo cuando piensa en el discurso. Los sets de aleteo que siguen refuerzan la intensificación de esta sensación como un recurso. Ahora el valor que el cliente asigna a sus emociones está en el lado positivo de la escala: “Ahora realmente tengo muchas ganas de dar el discurso.”

Es ideal si esta sesión de coaching (o una segunda) ocurre en el lugar exacto donde el cliente dará su discurso, es decir, el lugar que ofrece la vista de todas los asientos. Este proceso se llama “coaching en vivo”.

El proceso de coaching wingwave da inicio a la creación de conexiones neuronales que activan reacciones y emociones de fortaleza durante la situación sobre la que se está trabajando. “Estuve en mi mejor momento, completamente natural y  sin ningún esfuerzo,” dice el presidente ejecutivo cuando describe su desempeño una semana después del discurso.